New day

Hoy es el último día de agosto. Termina un mes lleno de sentimientos descontrolados y caprichos inalcanzables. Y hoy tengo tanto miedo de perderlo, como nunca antes...
Pienso todo el tiempo en lo tonta que fui. Egoísta e incomprensible. Pendeja y caprichosa. Todo el tiempo buscando esa perfección que no existe. Anhelando ser la mejor. ¿Qué gané? Nada, solo tristeza. Y lo peor es que la generé no sólo en mi, sino también en las personas que más amo. En él, a quien más amo.
Pero no es tarde; nunca es tarde para mejorar. Porque el progreso es mi máximo objetivo. De los errores se aprende. Aprendí. Comprendo lo que fui, lo que soy y lo que quiero ser. Es decir, la mejor persona que voy a lograr ser. Por él, por mi, por ellos. Las actitudes de mierda me saturaron. Mis actitudes.
Y hoy, de un día para el otro, veo todo con más claridad. Abrí los ojos.
Sólo espero otra oportunidad. De ahora en más, el sol va a brillar con mayor intensidad.


Soy conciente al fin, y estoy feliz.